Los dos tomos de Valerosas suman treinta vidas, voces de grandes mujeres de la historia en viñetas. Todas con algo en común: "el trabajo más difícil era encontrar un patrón que pudiera explicar y que se repitiera en todas ellas", cuenta la ilustradora y dibujante de cómics Pénélope Bagieu. Te dejamos el adelanto de dos de las historias que puedes encontrar el el segundo tomo:
Sonita Alizadeh nació en Herat, Afganistán. A los 9 años le adjudicaron marido pero su boda se canceló porque su familia tuvo que huir a Irán. Allí, su tía la internó en un centro de refugiados donde aprendió a escribir y... descubrió el rap. Desde entonces, escribió sin parar, cantando a sus compañeros en el comedor. Un día, grabó una canción y la subió a YouTube. Se llamaba Brides for Sale y cantaba las penas de las mujeres de su país, sometidas a tradiciones que las consideraban mercancías.
Aunque diferente, también es interesante el relato de Christine Jorgensen. Al nacer se llamaba George y tenía un cuerpo de morfología masculina, algo que afectó a toda su vida. Durante toda su niñez, sufrió por tener que vestirse con ropa de chico y de adolescente estuvo enamorada de su mejor amigo. Su escasa corpulencia la excluyó de combatir en filas durante la Primera Guerra Mundial, y a los 23 se mudó a Dinamarca. Allí, dio el paso para convertirse en una de las primeras mujeres en someterse a una operación de cambio de sexo sin esconderse, saliendo en televisión y escribiendo sobre su evolución, dando voz a muchas personas que habían sufrido como ella.
La historia de Sonita y de Christine están separadas geográfica y temporalmente, pero las une la misma voluntad: hacer lo que quieren a pesar de las circunstancias. Ambas, protagonizan sendos capítulos de Valerosas, un obra dividida en dos cómics cuyo segundo tomo acaba de llegar a las librerías españolas de la mano de Dibbuks. Su autora, Pénélope Bagieu, estudió, escribió y dibujó sus vidas semanalmente para Le Monde. También editó no una, sino dos recopilaciones de su trabajo en lo que es un fantástico recorrido histórico sin rumbo pero con objetivo: empoderar y dar voz a mujeres largamente silenciadas.
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