¿Cómo surge la idea de montar Pucheros &Guisos?
Siempre digo que se trata de un I+D+N: Investigación, Desarrollo y Necesidad. Me tomé la familia y la maternidad como una auténtica profesión. Cuando intenté reincorporarme al mundo laboral, tenía 49 años, poca experiencia y poca formación para el empleo. En el Espacio de Igualdad Clara Campoamor me ayudaron en mi empoderamiento y tuve la oportunidad de asistir a charlas de Economistas sin Fronteras. Empecé a verlo claro. Tenía muchas competencias adquiridas durante todos los años que me dediqué a las tareas de cuidado. Escuchaba en mi entorno “me comería unas verduritas pero, por no hacerlas…”. Acababa de detectar una necesidad a la que podía dar cobertura. Este es el embrión de mi proyecto, Pucheros&Guisos.
¿Cuál consideras que es la propuesta de valor de tu propuesta empresarial?
La comida de mamá, cocina casera, tradicional, realizada en tu propio domicilio, con tus ingredientes y herramientas. En los honorarios incluyo la compra de los ingredientes necesarios para las recetas, “yo hago la compra y tú pagas el ticket”. La idea es facilitar a mis clientas y clientes una alimentación de calidad y saludable, realizada en su propio hogar, ahorrándoles el tiempo de planificación, compra y elaboración.
¿Quién es tu clientela potencial?
Todo el mundo… familias, parejas, estudiantes que comparten pisos, personas que viven solas, personas mayores…. Cuando alguien se interesa por mis servicios mantenemos una entrevista personal. Cada clienta o cliente tiene una ficha personal en la que se detallan sus gustos, alergias alimentarias, intolerancias o si sigue alguna dieta. En base a toda esta información elaboro en su domicilio 4 o 5 platos completamente adaptados a sus necesidades.
La comida es una necesidad, pero también tiene algo de lujo, de placer. ¿Dónde se enmarca P&G?
Es comida de lujo a precios básicos. Lo que yo cobro es la mano de obra, la elaboración, los ingredientes los aporta la clienta o el cliente. Aunque yo haga la compra es siempre bajo sus directrices. Ofrezco un precio cerrado, por 45 euros cocino 3 horas en tu casa, 4 o 5 platos, que vienen a veinte raciones. Sigo el principio que he denominado CCC, “Cocina, comparte, congela”
¿Qué balance haces de estos primeros meses de rodadura?
El balance de estos meses ha sido bastante positivo. Me siento muy agradecida por el apoyo que he recibido de REAS Madrid, por las compañeras del Espacio de Igualdad Clara Campoamor y por mi entorno personal. Estoy encontrando muchas facilidades en todos los recursos a los que acudo y la recepción de mi proyecto está siendo estupenda.
Estos meses me están dando la oportunidad de evaluar, de analizar algunos puntos susceptibles de mejora. Gracias a este proceso de análisis, el proyecto ahora es mucho más sólido.
Háblame de los obstáculos ¿ha habido muchos? ¿Por ser mujer?
Por ser mujer y por ser mayor he tenido dificultades para acceder a un empleo por cuenta ajena, no para emprender. Tal vez la mayor dificultad que me estoy encontrando es la de llegar a nuevas clientas y clientes. La gente está acostumbrada a contratar a una persona para que realice tareas de limpieza o de mantenimiento del hogar, no tanto a contratar a una persona exclusivamente para que cocine. Este es sin duda uno de los retos con el que mi propuesta tiene que lidiar.
¿Qué consejos les darías a aquellas mujeres que estén pensando en emprender?
Que no se desanimen, que confíen en ellas mismas, lo difícil es tener una idea y desarrollarla. Les diría que busquen recursos y que los utilicen, que sigan aprendiendo y formándose. Hay que poner todo el empeño en que la cosa funcione.
Nos despedimos de Carmen con la satisfacción y la inspiración que proporciona conocer a una auténtica luchadora.
Desde Igualate.org deseamos mucha suerte a su aventura gastronómica.
Si quieres saber más….
www.facebook.com/Pucheros-y-Guisos-1435479389855355/?ref=br_tf