Igualate.org - Plataforma de Orientación Socio Laboral con perspectiva de género | federación de mujeres progresista
Orientación Sociolaboral con perspectiva de género
 
 
buscar
Búsqueda en los contenidos de la web
Con nombre y apellidos

May Serrano y Silvia Allende

May serrano
1. ¿Qué es La Quinta Ola? ¿Por qué os lanzasteis con este proyecto?
 
La Quinta Ola nació cuando consideramos que había llegado el momento de dedicarse profesionalmente a algo que veníamos haciendo informalmente, de manera intuitiva, amorosa, sin dirección. Nuestra propia experiencia en el terreno del empoderamiento de las mujeres, nuestra formación en feminismo y todo el trabajo previo de las dos en el mundo del arte, la performance, el teatro, la comunicación y la creación de grupo de mujeres nos avalaban.
Vimos cómo nuestra experiencia daba fuerza a otras mujeres. Se contagiaba. La metodología de la Exigencia Cero, que creamos con Mujeres Imperfectas, realmente era eficaz: a nosotras nos estaba funcionando, nos empezábamos a convertir en dueñas y señoras de nuestras vidas. Para seguir creciendo, el cuerpo nos pidió abrirnos a otras mujeres, compartir, entrenar con ellas. En La Quinta Ola trabajamos con mujeres. Todas nos hacemos de espejo, pero también de cristal, de ventana a través de la que mirar.
 
2. Formáis parte del colectivo Mujeres Imperfectas, ¿cómo pensáis que nos afecta la autoexigencia? ¿De qué manera es limitante y nos influye a nivel personal, social, laboral...?
 
Las Mujeres Imperfectas dejamos de funcionar como colectivo hace un año aproximadamente. Cada una de nosotras había sabido aprovechar la fuerza del grupo y estábamos todas desarrollando proyectos individuales. Así, llegó un momento en el que nos pareció que no era necesario seguir manteniéndonos como agrupación. Pero el trabajo desde la Exigencia Cero sigue siendo una constante en nuestro día a día.
La vida moderna está repleta de exigencias que nos lastran y nos limitan. Muchas de ellas las tenemos tan interiorizadas que ni siquiera somos conscientes de ellas. El miedo a hacerlo mal, a no dar la talla, a ser insuficiente, es una poderosa arma de desactivación masiva. Con la Exigencia Cero eso no pasa porque te atreves, pruebas ‘qué pasaría si', te das permiso para equivocarte y entonces actúas.
 
3. Desde la Quinta Ola se hace hincapié en el empoderamiento femenino como elemento  impulsor de la igualdad, ¿construir redes empodera? ¿Qué necesidades habéis detectado en vuestra Escuela de Empoderamiento?
 
Desde el momento en que algo tan simple como saber que "no estás sola" da fuerza, por supuesto que construir redes empodera. Si además trabajas en un espacio de confianza, donde hay libertad, sin etiquetas, ni caretas, lo que sucede es que te atreves, pruebas, entrenas... y todo eso luego se nota en tu día a día.
 
Las mujeres necesitamos  pasar la teoría por el cuerpo. Lo que nosotras nos venimos encontrando es que sabemos que somos el segundo sexo, que sufrimos desigualdad, que los parámetros estéticos son una esclavitud, que la talla 38 "es el burka de occidente"... lo sabemos, pero no lo practicamos. Pasar de la teoría a la práctica a veces es una maratón. Después de asistir a un taller sobre el lenguaje sexista o la violencia simbólica, llegamos a nuestra casa, o nuestra oficina  y seguimos poniéndonos en un segundo plano (o en un tercero), seguimos siendo complacientes con los otros, cumpliendo las expectativas de los demás, con una sonrisa, sin saber qué es lo que nosotras realmente queremos. Por eso creemos que lo que necesitamos es entrenar, poner en práctica la teoría, llevarse lo aprendido a casa.
la quinta ola imagen
4. Hemos visto que estáis detrás de otras iniciativas como el Café para Autónomas o el Campus Relatoras, ¿faltan espacios en los que contar y contarnos?
 
Cuando nosotras necesitamos un espacio lo creamos, no esperamos que nadie venga a dárnoslo hecho, a ponérnoslo. Por nuestra experiencia sabemos que te puedes convertir en una momia si esperas eternamente que llegue una subvención, una colaboración... Por eso solemos empezar de forma autogestionada, y si vemos que la cosa va bien, que el proyecto crece y funciona, valoramos buscar colaboración. Es lo que hicimos hace años con con Café para Madres y estamos empezando a hacer con el Café para Autónomas. 
 
El trabajo con Campus Relatoras es diferente. Conocíamos la actividad de esta plataforma de cursos on-line y compartíamos con ellas muchos de nuestros valores. Fue muy fácil encontrar puntos en común y abrir nuestros talleres de alguna manera al mundo digital. Esto nos ha permitido entrar en contacto con mujeres de todo el mundo. Un trabajo que para nosotras desde luego ha resultado ser muy enriquecedor.
 
5 ¿Qué tenéis ahora entre manos?
 
Queremos seguir ofreciendo esto a otras mujeres, llevar la Exigencia Cero más lejos todavía y que otras, como nosotras, puedan crecer con ella, y tomar las riendas de sus vidas. Estamos en un momento de contagio máximo, donde lo que queremos es hacer extensible todo esto. Hemos lanzado algunos proyectos y algunas instituciones tienen propuestas nuestras sobre la mesa, pero preferimos no adelantar nada más. Que dicen que trae mala suerte.